Siete Consejos de un Monje Budista para Hacer Limpieza en tu Hogar

Si intentas juntar energías para darte a la tarea de desempolvar y limpiar cada rincón del hogar, pero siempre encuentras algo mejor que hacer, lee esta nota.  Al parecer, los monjes budistas le darían a la limpieza de la casa un significado profundo, que podría serte de ayuda. Te lo revelamos.

Qué le parecería hacer la limpieza de casa como la hacen los monjes budistas? No es difícil, al contrario, es muy divertido. Si quiere purificar su alma sin moverte de casa, puede hacerlo transformando las tareas del hogar en un ejercicio espiritual».
El monje Tulku Thondup ha trabajado durante toda su vida en la traducción e interpretación de antiguos textos del budismo tibetano y ha publicado una docena de libros sobre enseñanzas budistas.
Después de haber vivido en el , la India y Estados Unidos y de haber participado en la vida pública y académica, en la actualidad se encuentra recluido en un monasterio desde donde mantiene un sitio web. Según narra, limpiar el monasterio es una de las tareas espirituales más importantes.

Si supiéramos la virtud, el mérito y el propósito de limpiar, seríamos capaces de apreciar la tarea como un privilegio en vez de una carga. No nos parecerá más un trabajo sucio, sino una oportunidad de practicar la meditación de una forma única.
Podría convertirse incluso, en una fuente increíble de beneficios, y una forma de crecer en fuerza espiritual, mental y emocional.  Limpiar el lugar que habitamos de una manera consciente puede transformar nuestra vida pues nos permite despejar la mente,  despejar los problemas, fortalecer la concentración, meditar en movimiento y crecer espiritualmente.

Consejos de un Monje Budista para Hacer Limpieza en tu Hogar

Meditar haciendo las tareas del hogar:
Este espacio sagrado que tanto nos aporta también tiene sus necesidades, que a veces desatendemos, imbuidos como estamos en la vorágine de la vida diaria.  Y así los papeles se acumulan, las prendas se amontonan en el armario, la pila de platos sin fregar crece en la cocina y no encontramos sitio para poner nada.


El hogar deja entonces de ser un cobijo para convertirse en una fuente de estrés e infelicidad, en una carga, no solo física sino también mental y espiritual.  Es como si la casa se nos cayera encima, esa sensación de “no me concentro en nada “ y “todo lo dejo sin terminar”.
Aquí hay una lista de consejos de Thondup para limpiar nuestro hogar:
1. “Quienes no cuidan los objetos, tampoco cuidan de las personas”. No debemos olvidar que cada objeto fue creado con el trabajo de alguien y ser cuidadoso a la hora de limpiarlo muestra respeto y gratitud por ese trabajo.
2. Debemos ser agradecidos con las cosas que alguna vez nos sirvieron. Debemos reciclar lo que ya no necesitamos para que nosotros, o alguien más, podamos seguir usándolo.
3. “Si empezamos en silencio, rodeados por la calma, cuando la vegetación y las personas de alrededor aún duermen, nuestro corazón se sentirá en paz, y nuestra mente, despejada”. Es por eso que debemos comenzar a limpiar a primera hora del día. Antes de dormir, debemos ordenar un poco para poder empezar la limpieza al día siguiente.
4. Debemos abrir las ventanas y dejar que circule el aire por toda la casa antes de comenzar a limpiar. El aire puro hará que tengamos más ganas de limpiar y además nos permitirá “entrar en contacto con la fragilidad humana, la naturaleza y la fuerza de la vida”.

5. No dejes platos sucios ni residuos de comida durante la noche. Los platos se lavan al finalizar el día y la basura orgánica se convierte en composta para las plantas. Todo en el hogar funciona como un ecosistema.
6. Cuando estés limpiando piensa sólo en la tarea que estás realizando en ese momento. Evita que tu mente divague o se concentre en otras cosas. Mantén tu atención en el aquí y el ahora de la tarea que realizas.

7. Siempre divide la limpieza con el resto de los miembros de la familia o las personas con las que compartes la casa. Así aprenderás a valorar el trabajo de los demás y entenderás que dependemos los unos de los otros.
No es casualidad que muchas culturas y tradiciones religiosas resalten la importancia de la limpieza. Un discípulo de Buda dice que se iluminó mientras barría el suelo y a Jesús no se le cayeron los anillos por lavar los pies a los apóstoles.
Por más que limpiemos, siempre queda algo por limpiar. Impliquemos en las tareas a toda la familia. La limpieza es una fuente de renovación diaria al alcance de todos.