El mal humor de los padres afecta al desarrollo emocional del niño

La estabilidad emocional de los padres es parte fundamental para el desarrollo óptimo del niño. En caso contrario, se genera un efecto negativo en las áreas emocionales y cognitivas del mismo.
Es fundamental detectar y evitar el mal humor de los padres de una forma continuada, puesto que la estabilidad del niño puede verse seriamente afectada.

Mal humor de los padres: un problema que puede afectar seriamente a los niños

El mal humor de los padres puede llegar a acarrear serias consecuencias en el desarrollo emocional de los hijos; especialmente si ese mal humor se presenta de forma repetida.


Los gritos hacia el hijo o hacia demás miembros de la familia pueden generar en los más pequeños de la casa serias inseguridades. También podrían surgir, en algunos casos, sentimientos de culpa.
Los niños son particularmente vulnerables a este comportamiento entre los 0 y los 3 años de edad. Sin embargo, esto no significa que no se vean afectados si son mayores.

Es importante que los padres estén atentos y cuiden su propio comportamiento en todo momento. Esta recomendación es válida tanto por la propia salud mental de la persona, como por la estabilidad de todos los miembros de la familia.

¿Por qué se genera el mal humor de los padres?


El mal humor de los padres puede tener muchos orígenes. Lo importante es detectar el problema y hacer todo lo posible por solucionarlo antes de que afecte seriamente a las personas que se encuentran alrededor, especialmente a los niños.
Los factores que pueden desencadenar el mal humor son múltiples. Los mismos pueden venirse arrastrando desde muchos años atrás, y en ese caso será necesario buscar a un profesional para tratar el problema.
En otras ocasiones, el estrés provocado por problemas laborales o personales es el causante. Si esto ocurre, es bueno buscar actividades que permitan drenar la energía; y en caso de que se haga imposible controlar esos sentimientos, será necesario acudir a un especialista.

Los efectos que el mal humor de los padres puede generar en los niños

Inseguridad

Es uno de los principales efectos que puede causar el mal humor de los padres. Cuando el niño está expuesto constantemente a situaciones tensas y estresantes, especialmente cuando estas provienen de los padres, estas suelen generar inseguridades. Estas inseguridades, a su vez, pueden desembocar en un sentimiento de culpa.

Depresión y ansiedad

Junto con la inseguridad aparece la depresión y la ansiedad. Es común que los niños afectados por el repetido mal humor de los padrespresenten problemas de adaptación en el colegio y con otros niños de su edad.
El rendimiento escolar puede verse afectado, así como también la relación del pequeño con sus padres. El niño puede sentir miedo a expresarse libremente ante sus progenitores, lo cual acarrea una serie de conflictos emocionales a corto y largo plazo.

Conductas agresivas

El mal humor de los padres puede ser interpretado por el niño como ausencia de afecto. Esta apreciación es sumamente grave, ya que puede influir seriamente en el desarrollo del pequeño. Los niños que crecen con una relación fría y distante con sus progenitores suelen desarrollar conductas agresivas y claros signos de ansiedad.

¿Cómo evitar el mal humor de los padres?

Dependiendo de la gravedad de la situación, puede ser necesario la atención de un profesional. Sin embargo, si se trata de un problema incipiente, bastará con tomar ciertas medidas para corregir este carácter.

Tomar tiempo libre

Una de las principales recomendaciones para mantener un estado emocional óptimo es tomar un tiempo libre o propio. Hacer una hora diaria de ejercicio, leer o reunirse alguna vez con amigos es ideal para canalizar todo el estrés acumulado.

Fomentar la comunicación

Una forma efectiva de evitar situaciones estresantes es mantener una comunicación abierta y efectiva con las personas cercanas. El respeto y el poder expresar las opiniones son claves para mantener unos niveles de estrés bajos y una salud mental y emocional bajo control.

Reconocer que existe un problema

Es fundamental que el adulto reconozca que sus niveles de estrés y mal humor son elevados. La única forma de poder hacer frente a esa situación y cambiarla comienza por reconocer que existe.

También es importante transmitirle al niño que él no tiene la culpa. La comunicación, una vez más, es primordial para evitar que los diferentes miembros de la familia se vean afectados.
El mal humor de los padres puede afectar seriamente el desarrollo psíquico y emocional de los niños. Reconocerlo y tomar las medidas pertinentes para afrontarlo y evitarlo es el comienzo de una mejor relación consigo mismo y con quienes están cerca.