Hay muchas personas que pasan la vida buscando ser felices, y creen que algún día lo conseguirán, lo que sucede al final es que pasa la vida, y no has disfrutado de ella. Gente que de niños le inculcan unas metas, y creen que poco a poco si siguen todos los pasos, conseguirán ser felices, en mi opinión nada de eso se asemeja a una verdadera felicidad.
Y es que de pequeños, tanto la sociedad, como la educación y la familia, nos llevan por un camino, que quizás no es el adecuado, y llega un momento que ni siquiera nosotros sabemos que queremos ser, hacia donde queremos ir.
Primero se quiere una estabilidad laboral, mucha gente empieza a estudiar cualquier cosa, que decide a los 18 años, y que con esa edad ni siquiera tienes claro casi nada, y te empeñas, en estar años y años , atrapado encerrado entre apuntes y papeles para sacar nota, para poder terminar tus estudios, para luego asi tener un gran trabajo.
Cuando lo consigues, aun no ha acabado, tienes que competir con los demas, sacar mas notas, hacer mas cursos y formarte y formarte en algo, que a los 18 te parecia bien, pero que ahora a casi los 30 ni te gusta. Pero todo es por tener un trabajo.
Cuando consigues un trabajo estable, quizas no te hace feliz pero ya tienes una estabilidad economica y bueno vas a por el paso dos, tener una estabilidad emocional, buscar a tu pareja.
En el ambito de relaciones, también se esta muy perdido, los hay que llevan juntos desde pequeños, y ya no saben ni porque estan juntos, ni porque deberian estar separados, se convierte en una costumbre, en una seguridad, en algo que crearon de niños, y que ya de adultos aunque hayan crecido en diferentes caminos, siguen, por no empezar de nuevo, se adaptan y viven vidas juntas pero sin compartirlas.
Otros en cambio, en la soledad, buscan cualquier persona como ellos, estables laboralmente, para conseguir un futuro juntos, mas o menos compartir los gastos, pero donde tampoco hay amor, solo buscan alguien estable, con quien la vida no le vaya a ir mal, y empieza el tercer paso, formar una familia.
Muchos por aburrimiento, por pensar que eso ya les llenara el vacio que tienen en la vida, se ponen a tener hijos, hijos de padres con una relación muerta, solo por seguir querer escalando los pasos de la vida, seguir y seguir buscando otra meta, que nunca tiene fin y que nunca te hace feliz.
Y llegas a la vejez y te das cuenta, que has pasado la vida, esperando que algo llegue y que algo pase para ser feliz, y nunca pasa, y ya no te queda tiempo, ya es tarde, para buscar que era lo que realmente ponia tu mundo «perfecto» patas arriba, ese algo que estaba en tu interior, que nunca has hecho nada por descubrir que era ese algo, y luchar por ello.